Reclamos de deudas: vías legales para recuperar tu dinero

Prestar dinero, vender productos a crédito o brindar servicios sin cobrar al contado puede derivar en un problema común: la morosidad. ¿Qué pasa cuando un cliente, socio o conocido no paga? ¿Qué herramientas legales existen en Uruguay para reclamar deudas y recuperar lo que nos corresponde?

Desde Estudio RIM te explicamos las principales vías legales disponibles, las etapas del reclamo y consejos prácticos para proteger tus derechos como acreedor.

¿Qué es una deuda exigible?

Una deuda es exigible cuando existe una obligación cierta, líquida y vencida. Es decir:

  • Cierta: reconocida por un documento, contrato, factura o recibo.
  • Líquida: con un monto claro y determinado.
  • Vencida: cuyo plazo de pago ya expiró.

Cuando se cumplen estas condiciones, el acreedor tiene derecho a iniciar las acciones legales correspondientes.

Etapas del reclamo de deudas

1. Negociación extrajudicial

Antes de acudir a la Justicia, lo recomendable es intentar una solución amistosa. Esto puede implicar:

  • Reunirse con el deudor y plantear un plan de pago.
  • Enviar cartas de intimación o notificaciones formales.
  • Proponer quitas o refinanciaciones para facilitar el pago.

Muchas veces, la negociación directa evita costos y tiempos judiciales.

2. Conciliación previa obligatoria

En Uruguay, antes de demandar, es necesario pasar por una instancia de conciliación extrajudicial. Se cita al deudor a una audiencia donde las partes pueden llegar a un acuerdo. Si no hay solución, se obtiene una constancia que habilita a iniciar el juicio.

3. Juicio ejecutivo

Cuando la deuda está documentada en títulos con fuerza ejecutiva (como cheques, pagarés o letras de cambio), se puede iniciar un juicio ejecutivo, que es más rápido que un proceso ordinario. El juez ordena el pago inmediato y, en caso de incumplimiento, dispone embargos.

4. Juicio ordinario de cobro de pesos

Si la deuda no está respaldada por un título ejecutivo, corresponde iniciar un juicio ordinario. Aunque más lento, también permite reclamar judicialmente el pago, aportando pruebas de la obligación.

5. Embargo y ejecución

Si el deudor no paga voluntariamente, el juez puede ordenar medidas como:

  • Embargo de bienes inmuebles o vehículos.
  • Embargo de cuentas bancarias.
  • Retención de salarios o ingresos.
    Posteriormente, esos bienes pueden rematarse para satisfacer la deuda.

¿Qué plazos existen para reclamar una deuda?

Las acciones judiciales están sujetas a plazos de prescripción, que varían según el tipo de deuda:

  • Facturas comerciales: prescriben a los 4 años.
  • Honorarios profesionales: prescriben a los 2 años.
  • Préstamos documentados: prescriben a los 20 años.

Si el acreedor deja pasar estos plazos sin reclamar, pierde el derecho de exigir judicialmente el pago.

¿Qué riesgos corre el deudor moroso?

Además de la obligación de pagar el capital adeudado, el deudor puede ser condenado a:

  • Pagar intereses moratorios.
  • Cubrir costas judiciales y honorarios profesionales.
  • Sufrir afectaciones en su historial crediticio, lo que limita su acceso a préstamos futuros.

Recomendaciones para acreedores

  1. Documentar siempre las operaciones: contratos, facturas y recibos son pruebas fundamentales.
  2. Evitar préstamos verbales: lo que no está por escrito es difícil de reclamar.
  3. Enviar intimaciones formales: las cartas certificadas o telegramas colacionados generan constancia legal.
  4. Actuar rápido: no esperar demasiado para reclamar, ya que la deuda puede prescribir.
  5. Consultar con un abogado especializado: cada caso requiere la estrategia adecuada según la documentación y la solvencia del deudor.

Vías alternativas: mediación y arbitraje

En algunos contratos, las partes acuerdan que los conflictos se resuelvan por mediación o arbitraje en lugar de acudir a la Justicia. Estos mecanismos suelen ser más ágiles y reservados, aunque requieren la aceptación previa de ambas partes.

¿Por qué contar con asesoría legal?

Porque cada tipo de deuda exige un camino distinto. Un abogado puede:

  • Determinar si corresponde un juicio ejecutivo u ordinario.
  • Gestionar medidas cautelares para asegurar bienes del deudor.
  • Negociar acuerdos de pago que eviten procesos largos.

En Estudio RIM hemos acompañado a empresas y particulares en procesos de recuperación de créditos, asegurando que el reclamo sea eficaz y ajustado a derecho.

Conclusión

Reclamar una deuda no es un capricho: es ejercer un derecho legítimo. Existen diferentes vías legales en Uruguay, desde la negociación y conciliación hasta los juicios ejecutivos u ordinarios, que permiten recuperar lo que corresponde. Lo fundamental es actuar con pruebas claras, dentro de los plazos legales y con asesoramiento profesional.

En Estudio RIM estamos preparados para asesorar a acreedores en cada etapa del proceso de cobro de deudas. Si necesitás reclamar un crédito impago o enfrentar a un deudor moroso, consultanos: la vía legal correcta puede marcar la diferencia entre recuperar tu dinero o perderlo definitivamente.

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